Siempre que realizamos fotografías pueden aparecer cosas raras, rayas, puntos, manchas, etc.
Tanto al realizar fotografías astronómicas como otras, siempre cabe la posibilidad de que aparezcan los llamados “artefactos”.
Estos artefactos suelen ser provocados principalmente por suciedad o cuerpos extraños en las lentes, filtros o el propio sensor de la cámara. Aunque lo acabemos de limpiar todo muy bien, no estamos exentos de una perturbación de este tipo.
Tengamos en cuenta que una pequeña mota de polvo o una partícula que se ha soltado de los filtros o adaptadores que roscamos, pueden ir a parar a nuestra imagen.
También se pueden colar en la imagen determinados reflejos que dan la sensación de “ser algo”.
Al realizar fotografías astronómicas nos exponemos también a que en nuestra imagen aparezca la línea de un satélite, como si fuese la estela de una estrella fugaz, o bien la sombra de un ave o de un insecto que cruza el campo de visión en ese momento.
Si en una secuencia de fotografías, la perturbación se repite en el mismo lugar del encuadre, pero distinta ubicación respecto a la imagen, ahí tenemos una partícula o una mancha que limpiar.
No son pocas las imágenes que, con sus artefactos correspondientes, se toman como indicio de la presencia de alguna entidad extraña o de un ingenio espacial que vaya usted a saber de dónde viene.
Tanto al realizar fotografías astronómicas como otras, siempre cabe la posibilidad de que aparezcan los llamados “artefactos”.
Estos artefactos suelen ser provocados principalmente por suciedad o cuerpos extraños en las lentes, filtros o el propio sensor de la cámara. Aunque lo acabemos de limpiar todo muy bien, no estamos exentos de una perturbación de este tipo.
Tengamos en cuenta que una pequeña mota de polvo o una partícula que se ha soltado de los filtros o adaptadores que roscamos, pueden ir a parar a nuestra imagen.
También se pueden colar en la imagen determinados reflejos que dan la sensación de “ser algo”.
Al realizar fotografías astronómicas nos exponemos también a que en nuestra imagen aparezca la línea de un satélite, como si fuese la estela de una estrella fugaz, o bien la sombra de un ave o de un insecto que cruza el campo de visión en ese momento.
Si en una secuencia de fotografías, la perturbación se repite en el mismo lugar del encuadre, pero distinta ubicación respecto a la imagen, ahí tenemos una partícula o una mancha que limpiar.
No son pocas las imágenes que, con sus artefactos correspondientes, se toman como indicio de la presencia de alguna entidad extraña o de un ingenio espacial que vaya usted a saber de dónde viene.
Fotografía del cometa 12P/Pons-Brooks, a su lado una estela potente, provocada por el paso de un satélite |
Fotografía del Sol, con un artefacto en el borde, arriba a la derecha. Se trata de una partícula desprendida sobre el filtro |